Luiza Ungerer conoció al futbolista argentino Emiliano Sala en Nantes, donde se desempeñaba como jugadora profesional de vóley, en 2017. Días después del fallecimiento del jugador en un accidente aéreo cuando viajaba a Cardiff, Ungerer se tatuó el número 9 en el brazo izquierdo para recordarlo.

La pareja se conoció a través de Instagram y fue en esa red social que la deportista compartió una fotografía del tatuaje nuevo, acompañado de la leyenda: "Para siempre Emi", acompañado de un corazón.

En una entrevista al medio brasileño O Globo, contó cómo vivió la dramática búsqueda del avión desaparecido: "Fue mucha la angustia de no saber dónde estaba el avión, y de no saber lo que iba a suceder. Las búsquedas no deberían haber parado. Todos los días fueron angustiantes", recordó.