Contenido creado por María Noel Dominguez
Pantallazo
Muñeco bravo

Facundo Arana vuelve al centro de la polémica: "El feminismo debería cuidar que su brazo fundamentalista no se lo coma"

"No sigo a las que son feministas de pacotilla, sino a las de verdad", dijo el actor Facundo Arana y redobló la apuesta que lo tuvo en el centro de la polémica.

14.01.2018 12:40

Lectura: 3'

2018-01-14T12:40:00-03:00
Compartir en

"Para mí una vida está dentro de un terreno sacro, pero creo que hay que debatir sobre la legalización del aborto, porque hay que analizar cada caso. Para entender eso, no sigo a las que son feministas de pacotilla, sino a las de verdad, como Florencia Etcheves y fue ella la que retuiteó un video en el que Favaloro habla de la necesidad de la legalización del aborto. Y digo, qué bueno cuando hablan los que saben", aseguró el actor en Clarín cuando le preguntaron su opinión por un tema tan controvertido.

"El feminismo debería cuidar que su brazo fundamentalista no se lo coma. En el medio de todas las barbaridades que dijo, Muriel [Santa Ana] está pidiendo hablar de la legalización del aborto. Entonces, hablemos. Qué importa que lo haya planteado del modo que lo hizo, si lo que está pidiendo está bien. Después la cosa cool de ‘te apoyo, acá es la fila para abrazarte'... Andá a cag... Hablemos de las cosas serias, lo de fondo. El feminismo es mucho más que cuatro minas con 50 trolls escribiendo barbaridades", señaló, sobre el impacto que tuvo su frase, según consigna el sitio argentino Ciudad.com

"Salieron a hablar de violencia de género, del aborto y del feminismo. Bueno, carajo, pará, ¿yo qué dije? Que le mandaba un beso muy grande a alguien que fue tremendamente importante en mi vida y que creo yo que se realiza como mujer y como ser humano, porque encontró el amor y puede ser madre. Sí, se realizó. También se realizó en otras cosas antes, con su carrera, pero ¿hace falta que lo aclare? Me di cuenta que no hace falta que aclare nada: yo no permití que eso se convirtiera en una lucha mediática de tontos. Me corrí", dijo.

"En mi casa no hay problemas de machismo o feminismo. En mi casa somos todos iguales. Lava los platos el que está más cerca de la bacha o el que tiene ganas. Y todos tenemos ganas. ¿Cuál es el problema? Yo no puedo sentarme a debatir con gente que tuvo declaraciones más desafortunadas que las mías, al criticarme", lanzó. "Mis declaraciones no fueron desafortunadas, sino la edición que hicieron en Twitter. Tengo 45 años y yo pienso lo que quiero. No le doy mucha pelota", sentenciò.