Contenido creado por Inés Nogueiras
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Gente que busca gente

¿Qué buscan los productores de los realities?

Cómo se realizan los castings de programas como "Gran Hermano" y "Soñando por Bailar"? ¿Qué se busca en la selección de los participantes? Según los productores, importa menos la historia personal que un carácter "que invite al conflicto".

03.02.2011 10:30

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2011-02-03T10:30:00-03:00
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Montevideo Portal

El diario La Nación realizó un reportaje sobre la "cocina" de Gran Hermano y Soñando por Bailar, los realities que actualmente se emiten en la vecina orilla y que aquí llegan en vivo por Canal 4 y Canal 12, respectivamente.

La productora de Gran Hermano 2011, y de todas las anteriores ediciones de este programa, es Ana Laura Deluso y habló sobre la esencia de lo que se busca cuando se realiza un casting para este tipo de formato.
"Buscamos personalidades fuertes, que inviten al conflicto, porque eso forma parte del atractivo", señala, y agrega que las historias o ciertos aspectos como la opción sexual de la persona no son determinantes.

"Lo obvio es meter a un gay porque hay que meter a un gay. Nosotros no hacemos eso. Nosotros buscamos formar un grupo, y en ese grupo lo interesante son las personalidades. El resto son datos. En un punto, ni nos interesa la historia; nos interesa cómo se relaciona la persona con esa historia. Alejandro no entró porque es transexual sino por cómo encaró ese tema. Incluso ni siquiera es un militante", dijo la productora.

El casting para Gran Hermano llevó un mes, y lo realizó un equipo de doce personas. De 35.000 aspirantes se redujo a 50, previo filtro de dos pruebas de cámara. Los cincuenta preseleccionados realizaron entrevistas personales, señala el matutino.

"Yo lo que busco en el casting es que la elección resultante sea una muestra de la sociedad", agregó, afirmando que de ahí la decisión de incluir a homosexuales se debió más que nada a que "es un dato de la realidad que no podés obviar".




Por su parte, "Soñando por Bailar" es producido por Pablo Semmartin, quien estuvo detrás de la selección de los participantes que competirían en una isla por un lugar en "Bailando por un sueño".

Se presentaron 25.000 aspirantes que hicieron coreografías masivas y luego entrevistas personales. "Lo primero que se buscó fue un mix: buen baile más buena energía. Saber bailar, pero además tener ganas de estar en un reality, no de estar en la tribuna sino ganas de participar, de hacer cosas", dijo el productor.

"Les preguntábamos también hasta dónde estaban dispuestos a llegar por ser famosos. La historia de cada uno nos importaba, pero no fue determinante. Esto fue como un promedio sobre tres ejes: el baile, su historia y qué querían para su carrera", señaló a La Nación.

Semmartin afirmó que lo que se buscaba para el reality eran "historias que sirvieran para ir armando algo así como un juego de Tetris, donde las piezas van encajando. No armar un zoológico de gente sino más bien tratar encontrar sociedades futuras".

Y luego que el reality está en marcha, "una vez en la isla uno empieza a delinear la historia para tratar de inducir conflictos. Quién duerme con quién, qué parejas se pueden llegar a armar, quiénes pueden chocar. Eso lo vas viendo", señaló.

"Como en nuestro programa los camarógrafos y los productores hablan con los participantes, de repente lo que sí hacemos es decirles que sigan adelante con algo que vemos que es televisivo", agregó Semmartin marcando una aparente diferencia con Gran Hermano.

Consultado sobre los límites, Semmartin dijo que "es un reality para toda la familia. Con claroscuros que hacen al morbo de la gente y de ese morbo salimos y entramos, pero es para toda la familia".

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